La capacidad de comprender a otra persona y acudir en su ayuda a tiempo es la cualidad de un buen amigo. Pero algunas personas van demasiado lejos y se sacrifican de verdad.
Piensa en ti mismo
Quizás te dejas llevar un poco por el establecimiento de la vida de otra persona y te olvidaste de tu propia existencia. Piensa en ti mismo, porque quien piensa en ti, excepto en ti mismo. Seguro que tienes tus propios planes, metas y deseos. Cuida su implementación. De lo contrario, seguirán siendo sueños. Piense en el hecho de que solo hay una vida. No tendrás una segunda oportunidad para dar este o aquel paso.
Incluso si todo va bien en tu vida en este momento, ciertamente puedes mejorar algo. Piensa en qué áreas requieren tu intervención y ocúpate de ellas. Desarrolle y mejore, preste atención a su hogar y a su familia, construya una carrera, relájese y disfrute de la vida.
Algunas personas están tan acostumbradas a cuidar a los demás que se sienten culpables por su propia comodidad. Si también se define a sí mismo ante esas personas, es hora de hacer sonar la alarma. Comprenda que esta es una situación anormal y debe corregirse con urgencia. Comienza a mimarte y a elogiarte, cada día piensa en cómo puedes complacerte hoy Retírese a lo largo del día y pregúntese si está actuando en sus propios intereses en este momento o si está haciendo la felicidad de otra persona.
Egoísmo saludable
No debes poner los intereses de otras personas por encima de los tuyos. Esta es una posición no constructiva. Ámate a tí mismo. Al olvidarse de sus propios asuntos, está mostrando desprecio por su propia personalidad. No necesitas lastimarte así. Deje que una parte de egoísmo saludable aparezca en su carácter.
No dejes que las personas que te rodean se aprovechen de tu amabilidad. A veces, otros ven que hay un individuo confiable frente a ellos, siempre listo para ayudar, y comienzan a manipularlo. Para terminar con esta serie de autosacrificio, debes llegar al fondo de quienes te usan a tiempo.
Aprenda a decir la palabra no. Algunas personas actúan en detrimento de sus propios intereses solo porque no saben cómo negarse. No hay nada de malo en el hecho de que se sienta incómodo con la solicitud de otra persona. No le debes nada a nadie y no tienes que poner excusas ni disculparte.
Tal vez esté tratando de complacer a todos porque quiere complacer a todos. La necesidad de amor y respeto de quienes te rodean demuestra que no te estás tratando lo suficientemente bien. Toma tu propia autoestima. Buscar la aprobación de otras personas habla de sus dudas.
Comprenda que no puede inspirar simpatía en absolutamente todas las personas y al mismo tiempo seguir siendo una persona. Si tienes carácter, puede que no sea del gusto de todos. No tenga miedo de mostrar su propia individualidad y defender su posición.