Si los padres encuentran a su hijo adicto a las drogas, las conversaciones serias, las amenazas y las solicitudes serán de poco beneficio. Lo más probable es que la adicción ya haya causado dependencia física y mental. Por lo tanto, es importante que los padres se comuniquen con los especialistas de manera oportuna para tratar a su hijo.
Tratamiento de adicciones
La adicción a las drogas cambia drásticamente a una persona. El niño tranquilo de ayer se vuelve incontrolable, agresivo, irritable, irascible. Deja de controlar su comportamiento y sus emociones, para darse cuenta de la deplorable situación y las consecuencias de su hábito. El adicto tiene la ilusión de que puede deshacerse de su adicción en cualquier momento.
La adicción a las drogas requiere la intervención obligatoria y oportuna de los narcólogos para prescribir el tratamiento adecuado. Los padres de niños que consumen drogas deben buscar ayuda en un hospital de narcología. El tratamiento de drogas calificado integral es prevenir los efectos nocivos del uso de drogas en el cuerpo del niño, aliviar su salud y deshacerse de la adicción a las drogas.
Dependiendo de la situación financiera de la familia, puede confiar el tratamiento del niño a una clínica comercial. Como regla general, en dichos hospitales se utilizan métodos modernos y efectivos para deshacerse de la adicción. Se cree que las clínicas privadas pueden permitirse un servicio y tratamiento de mayor calidad que los centros gubernamentales de tratamiento de drogas. Los centros comerciales utilizan un curso de terapia más intensivo y, por lo tanto, la duración de la estadía de un niño en una clínica de este tipo es más corta que en un dispensario narcológico municipal. Además, las instituciones pagadas se distinguen por un régimen más estricto, que excluye por completo el uso de medicamentos por parte de los pacientes durante el tratamiento.
Registro de adicción a las drogas
En varios casos, la derivación a centros de tratamiento de drogas implica el registro con adicción a las drogas. Esta circunstancia presupone la restricción de algunos de los derechos civiles del adicto. El registro por adicción a las drogas impone la prohibición de realizar ciertos tipos de actividad laboral, conducir un automóvil, y pueden surgir dificultades para obtener diversas características positivas y certificados. El acceso anónimo a un centro de tratamiento de drogas puede ser una opción alternativa para el registro.
Se prohíbe el registro de adicciones a las drogas sin el consentimiento de los padres de un niño menor de edad. Además, no puede realizarse en casos de auto-búsqueda de ayuda, cuando el paciente no tiene trastornos mentales graves, y también expresa un deseo voluntario y sincero de deshacerse de la adicción.
Existen organizaciones público-benéficas especializadas y varias organizaciones sin fines de lucro que brindan apoyo y asistencia psicológica a los padres de niños drogadictos. En tales sociedades, es posible obtener asesoramiento de especialistas que le darán las instrucciones y recomendaciones necesarias. Los padres pueden intercambiar experiencias y recibir consejos de otras familias en las que los niños sufren de adicción a las drogas.