La vida humana se considera el valor más alto en la sociedad. Y, sin embargo, hay personas que están dispuestas a renunciar a su preciosa vida. La mayoría de las veces, esto ocurre durante problemas personales graves y crisis sociales. Las personas cercanas y amorosas pueden disuadir a una persona querida de una decisión fatal y ayudar a salvar la vida.
Instrucciones
Paso 1
Si un ser querido que está al borde del abismo cree en Dios, debe decirle que un intento de suicidio lo llevará inevitablemente a un estado aún peor. Las personas que intentaron suicidarse y fueron reanimadas dicen que vieron criaturas terribles y experimentaron un tormento insoportable. El suicidio no se perdona, porque ya no hay oportunidad de corregir y realizar nada. Una persona interrumpe su ciclo vital, quedando a merced de las emociones. Deja de percibir la vida como el regalo más preciado y cree que con su partida desaparecerán todos los problemas y tormentos.
El estado del que el suicida intenta escapar permanecerá con él para siempre. Todos los problemas pueden resolverse solo en la vida terrenal, pero en la eternidad no se puede arreglar nada. No se puede rezar por los suicidios y ninguna cantidad de dinero ayudará a los familiares inconsolables. Si usted mismo pertenece a la fe ortodoxa, lea el Salmo 90 imperceptiblemente en su habitación, ayuda a alejar los pensamientos suicidas.
Paso 2
Si una persona es atea o está tan torturada por situaciones que no puede ser convencida por la experiencia de otras personas, debe pedirle que exponga su problema en tres hojas de papel. Diga que desde el exterior será mejor discernir las causas del problema y los callejones sin salida mentales a los que la desesperación lleva a una persona. Y trata de encontrar esos callejones sin salida, es decir, esos pensamientos que no pueden ser probados por hechos, pero que gobiernan a una persona durante este período de la vida. Por ejemplo, un joven quiere suicidarse por la partida de su novia. Un pensamiento sin salida será la consideración de que la vida es imposible sin él. Marque el pensamiento por sí mismo. Y mientras una persona escribe, podrá organizar la información y encontrar la raíz del problema por sí mismo.
Paso 3
Las personas que han perdido el sentido de la vida necesitan una sacudida física y emocional. Saque a la persona de la casa, idealmente para hacer ejercicio. Si puedes estar con una persona durante mucho tiempo, dale una sacudida emocional por alguna razón extraña, no por sus intenciones suicidas. Luego maquilla violentamente, y cuando esté más equilibrado, transmítale el absurdo de una idea sin salida. En un estado alterado, te escucharán con más gusto. La vida de una persona se puede salvar simplemente prestándole atención y tiempo.