¿Qué es una fobia? Se trata de una determinada condición patológica, caracterizada por un miedo irracional y excesivamente obsesivo, a veces al borde del horror. A menudo se acompaña de ansiedad y aumento de la ansiedad. Hay muchas fobias diferentes, y entre ellas se pueden distinguir algunas de las más comunes.
Claustrofobia. Este trastorno patológico entra en la categoría de las llamadas fobias espaciales. La claustrofobia es una condición que puede empeorar en una persona que está atrapada en un espacio confinado. Es muy difícil para los claustrofóbicos estar, por ejemplo, en un ascensor. La fobia suele ir acompañada de síntomas de un verdadero ataque de pánico. Al mismo tiempo, una persona puede caer en un estado de pasión: correr por la habitación, gritar y llorar, pedir ayuda, dejar de controlar sus acciones y ser consciente de lo que está haciendo. La claustrofobia se caracteriza por una sensación de falta aguda de aire y pensamientos obsesivos de muerte inminente.
Glosofobia. Una gran cantidad de personas en todo el mundo temen hablar en público, se sienten incómodas frente al público, es extremadamente difícil para alguien leer un informe de estudio frente a una audiencia. Sin embargo, mientras este miedo no adopte características anormales, no hay nada de qué preocuparse. La glosofobia es el pánico que experimenta una persona enferma en una situación en la que necesita subir al escenario o simplemente actuar frente a un gran grupo de personas (incluso sus conocidos). En algunos casos, el glosófobo incluso puede desmayarse debido a la ansiedad y la excitación interna.
Carcinofobia. En las últimas décadas, se han observado cada vez más casos de desarrollo de esta forma particular de fobia. La esencia de tal trastorno es el pánico, a menudo un miedo irracional a contraer cáncer. Si en una persona normal los temores sobre esta enfermedad no van más allá de los límites de la adecuación, en un paciente con un trastorno fóbico, sus experiencias pueden incluso extenderse a reacciones somáticas. Un carcinófobo puede notar un aumento de los síntomas del cáncer de vez en cuando, aunque ningún examen médico confirma las sospechas. Como ocurre con la mayoría de las otras fobias, es casi imposible hacer frente a este trastorno por su cuenta.
Autofobia. Como sabes, una persona necesita una sociedad, necesita una empresa, necesita satisfacer sus necesidades de socialización, comunicación. Para algunas personas, la soledad prolongada puede convertirse en un verdadero tormento, mientras que otras pueden soportar más fácilmente el tiempo que pasan a solas consigo mismas. Sin embargo, en ambos casos, existe el riesgo de desarrollar autofobia, un miedo patológico a la soledad total. Si esta forma del trastorno no se corrige, en última instancia, la fobia puede provocar el desarrollo de un estado apático, depresión clínica y llevar a la persona a pensamientos intensos de suicidio.
Acuofobia. Este miedo irracional está asociado con el agua. Para una persona que sufre de una forma similar de trastorno fóbico, es muy difícil estar cerca de lagos, ríos y otros cuerpos de agua. No se puede ir a nadar a un estanque o al mar. Al entrar en el agua, un aquaphobe puede desorientarse por completo. En el contexto de esta condición, el pulso generalmente salta, aumenta la sudoración, aparece dificultad para respirar o una sensación aguda de falta de oxígeno. Poco a poco, el pánico puede cubrir al aquaphobe con la cabeza. Vale la pena señalar que el miedo patológico al agua a menudo se extiende a la vida cotidiana: es doloroso para una persona entrar en contacto con el agua de la ducha o del grifo, los procedimientos de higiene habituales se vuelven casi imposibles.