¿Cómo Se Llama El Miedo A La Sangre?

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¿Cómo Se Llama El Miedo A La Sangre?
¿Cómo Se Llama El Miedo A La Sangre?
Anonim

A veces, las personas se asustan con cosas absolutamente inofensivas: flores o imágenes de niños; sin embargo, los fenómenos que potencialmente conllevan una amenaza en sí mismos pueden actuar como irritantes: agua, fuego, altura. El miedo a la sangre es el cuarto más frecuente y muchos lo padecen en un grado u otro.

¿Cómo se llama el miedo a la sangre?
¿Cómo se llama el miedo a la sangre?

El miedo a la sangre, como muchos otros términos modernos, recibió su nombre del idioma de los helenos. En griego antiguo, "heme" significa "sangre" y "phobos" significa "miedo". Hoy en día, la comunidad científica se refiere al estado de pánico provocado por un tipo de sangre, hemofobia o hematofobia. El primer nombre es más común. La hemofobia se conoce desde hace mucho tiempo y muchas personas famosas han padecido esta afección mental. Por ejemplo, el emperador Nicolás II era muy sensible al tipo de sangre.

Nicolás II también sufría de hemofilia: coagulación de la sangre, que, muy probablemente, condujo a una fobia pronunciada.

Sin embargo, el pánico al ver una gota de sangre que sale puede ocurrir no solo en una persona que padece hemofobia. Se observará una reacción similar en la misma situación en aquellos que temen a las agujas médicas y procedimientos relacionados, así como en aquellos que tienen miedo de lesionarse. Por lo tanto, los psiquiatras estadounidenses incluso han combinado estas tres fobias en una categoría.

Signos de hemofobia

La gran mayoría de las personas experimentan emociones desagradables cuando ven sangre. Como regla general, esto es ansiedad, miedo, disgusto, disgusto. Sin embargo, la intensidad de las emociones depende directamente de la situación: ver a una persona ensangrentada después de un accidente provoca sentimientos mucho más fuertes que una palma arañada por un gato. La situación es diferente con las personas que sufren de miedo a la sangre. Independientemente de cuán extenso se revele el sangrado en sus ojos, experimentan los mismos síntomas: mareos, náuseas, ataque de ansiedad y aumento de la frecuencia cardíaca. En los casos más graves, la persona puede incluso perder el conocimiento. La intensidad de la manifestación de una fobia no depende del género, la edad o los rasgos de carácter: tanto una niña frágil como un hombre seguro de sí mismo pueden desmayarse al ver un dedo cortado.

A diferencia de una persona que no padece hemofobia, el paciente no es capaz en situaciones de emergencia de controlar su miedo y escapar o prestar primeros auxilios.

Tratamiento por miedo a la sangre

A lo largo de la vida, una persona tiene que lidiar periódicamente con cortes, rasguños y abrasiones sangrantes, por lo que la hematofobia puede arruinar significativamente la calidad de vida. Hoy en día, los especialistas ayudan con éxito a las personas a lidiar con su miedo obsesivo, llegando al fondo de sus causas (por regla general, estas son algunas situaciones dolorosas asociadas con el tipo de sangre, transferidas en la infancia) y controlando gradualmente la fobia.

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