La competencia corre como una línea roja a lo largo de nuestras vidas. Lo encontramos tanto en las relaciones personales como en el ámbito laboral, en el ámbito empresarial, en las relaciones interpersonales. Y cada vez nos enfrentamos a la misma tarea: estar a caballo, pasar por encima de todos los rivales y ser los primeros en llegar al codiciado premio.
Instrucciones
Paso 1
En primer lugar, debe determinar el objetivo final por el que está luchando. Por supuesto, puedes descartar este paso, porque muchas veces todo ya está claro, pero piensa si el objetivo que te propusiste es el final. Las carreteras en las que nos encontramos con competidores conducen a alguna parte, y es de vital importancia para nosotros no pasar por alto a un competidor en el aquí y ahora, sino para lograr un resultado.
Paso 2
Estudie a sus competidores. Si es posible, hazte amigo de ellos. Bajo ninguna circunstancia declare que son los primeros competidores, mantenga la línea de asociación, insista en que esencialmente está haciendo lo mismo. Si ya eres considerado un competidor, convence a tu oponente de que no tienes casi nada para oponerse. Ponlos a dormir y recopila información.
Paso 3
Analice los caminos que sus competidores no tomarán. Luego elige el más corto y evalúa la posibilidad de que puedas seguirlo. Recuerde que la confrontación abierta agotará a ambos lados, mientras que evitar el conflicto directo le ahorrará tiempo y energía.
Paso 4
Si la meta es tan ambiciosa que el logro rápido de la meta es imposible, estudie a fondo todas las características de la meta. Encuentra la carretera que puedas aprovechar al máximo. Capture y mantenga su objetivo anticipándose a las acciones de la competencia.