La capacidad de influir en una persona con palabras puede resultar muy útil en la vida. A menudo hay situaciones en las que es necesario obligar a una persona a aceptar su opinión y cambiar sus ideas sobre cualquier tema. Esta habilidad es especialmente apreciada entre diplomáticos, políticos, oficiales de inteligencia y otras profesiones que trabajan directamente con personas.
Primero, necesita identificar el sistema de percepción humano dominante. Es decir, averiguar cómo recibe la mayor parte de la información: a través del oído, la vista o las sensaciones táctiles. Por lo general, una persona lo indica él mismo, solo inconscientemente. Si constantemente le pide que mire algo, entonces el sistema visual es dominante. Si escuchas - auditivo.
Luego cree una atmósfera confortable de comprensión mutua. Escuche atentamente a la persona, observe qué palabras usa, dónde hace una pausa, etc. Debes imitar su manera de hablar. Esto no es tan fácil de hacer, dado que el interlocutor no debe notar desviaciones obvias en su comportamiento. Incluso es recomendable estar de pie en la misma posición que él, entonces la conversación fluirá aún más cómodamente.
Después de eso, puedes proceder al impacto. Díganos exactamente lo que quiere obtener. Dependiendo del temperamento de la otra persona, su discurso puede ser agresivo, tranquilo o suplicante. Ideal si consigues confundir a la otra persona. En este punto, no entenderá mucho y seguramente estará de acuerdo en ayudarlo.