Expresiones como "venganza a todos con una escoba" o "talla única" no aparecieron por casualidad. La mayoría de las personas tienden a medir a las personas que les rodean con la misma medida, sin entrar en detalles particulares: rasgos de carácter y rasgos de personalidad individual.
Instrucciones
Paso 1
Para tratar a todas las personas de manera diferente, debes darte cuenta de que todos los que te rodean no tienen que ser como tú en apariencia, carácter, personalidad, juicio y carácter moral. Solo una persona de mente estrecha puede pensar que hay dos tipos de opiniones: la suya y la incorrecta. Esto está mal. Todo el mundo tiene derecho a ser individual. Cada uno es único y tiene un conjunto único de ciertas características de apariencia y carácter. Por lo tanto, no debe sorprenderse que alguien fume, mientras que usted odia el olor a tabaco, y alguien engaña cuando practica la monogamia. No existen personas absolutamente idénticas, démoslo por sentado.
Paso 2
Una persona está formada no solo por sí misma, sino también por la sociedad que la rodea. Si un adolescente es descortés con sus padres y con todos los demás adultos, esto no significa en absoluto que haya nacido así o que quisiera volverse consciente, mostrando así una especie de protesta a la sociedad. Pero, ¿y si simplemente se metiera en malas compañías, en las que se niegan la mayoría de los principios morales adoptados en la sociedad, y sus padres estuvieran demasiado ocupados ganando dinero y no tuvieran tiempo para influir en él, por lo que tal comportamiento estaba profundamente arraigado en su frágil mente? No siempre es culpa de una persona que se comporte "no como todos los demás".
Paso 3
La vida personal de una persona está controlada solo por él y en una sociedad civilizada no se puede discutir ni criticar desde fuera. Los fundamentos morales y los valores morales de una persona individual son puramente asunto suyo y no conciernen a nadie, cómo, cuándo y con quién una persona entabló una relación, tuvo relaciones sexuales o cambió traicioneramente. Deje la condena y la crítica a usted mismo: esta es una manifestación de mal gusto y nada más.