Los científicos han estado luchando por descubrir los secretos de la verdadera felicidad durante mucho tiempo y constantemente están haciendo descubrimientos increíbles. Resulta que la felicidad no es solo un breve momento. Si se desea, la felicidad puede "prolongarse" y convertirse en un estado mental permanente.

Centrándose en lo importante
Intente comenzar su día con gratitud. Los problemas y las listas de tareas pueden esperar un poco, pero la gratitud por el momento presente, por los amigos y la familia, por un techo sobre su cabeza y comida en la mesa, nunca. Poniéndonos en una onda positiva desde la misma mañana, aprendemos a notar pequeñas cosas agradables e ignoramos los malentendidos molestos.
Por el momento, la mejor forma de desarrollar la concentración es a través de la meditación. Empiece a practicar diariamente, comenzando a los cinco minutos y aumentando gradualmente la duración. Al principio será difícil, pero con el tiempo será más fácil y agradable meditar.
Resiliencia emocional
Aprenda a aceptar. Luchando constantemente contigo mismo y con el mundo que te rodea, agotas tu componente emocional, vacías tu vitalidad. Quizás te ayuden las palabras del teólogo alemán Karl Friedrich Etinger: “Señor, dame tranquilidad para aceptar lo que no puedo cambiar, dame el coraje para cambiar lo que puedo cambiar y dame sabiduría para distinguir unos de otros."
Actividades deportivas
El deporte trae cambios positivos a todas las áreas de tu vida. Además de un cuerpo hermoso, recibirás una carga de vivacidad y buen humor, excelente alivio psicoemocional y aumento de la resistencia al estrés y la vitalidad en general. Además, el ejercicio regular ayuda a desarrollar la concentración y un mejor enfoque.
Buenos hábitos
De hecho, cada uno de nosotros puede ser feliz si nos lo permitimos. La felicidad se esconde en las pequeñas cosas que podemos controlar. Podemos dormir lo suficiente todas las noches si nos ocupamos de ir temprano a la estación lateral. Podemos sentirnos mejor normalizando nuestra dieta y eliminando la comida rápida. Podemos sentirnos inspirados leyendo buena literatura, viendo buenas películas, asistiendo a exposiciones, etc. Y podemos permitirnos hacer ese negocio que nos da alegría y placer.