La adicción al juego se considera en general un trastorno mental asociado con el deseo persistente de jugar de una persona. En este caso, la adicción puede surgir de cualquier tipo de entretenimiento, pero la mayoría de las veces existe una variante de la influencia dañina de los juegos de computadora en una persona.
La adicción al juego es una enfermedad mental que conlleva una serie de graves consecuencias no solo para la propia persona, sino también para su entorno cercano. La adicción a los juegos de computadora comienza, por regla general, con un deseo aparentemente inofensivo de relajarse. Poco a poco, el mundo virtual se apodera tanto de la conciencia de una persona que no puede vivir ni un minuto sin un juego. No es difícil reconocer la presencia de adicción al juego. Solo hay algunos signos de que se puede identificar este tipo de trastorno mental.
- reacción dolorosa al fracaso (en este caso, nos referimos no solo a un trastorno a corto plazo, sino en mayor medida a la aparición de agresión, apatía y otras emociones pronunciadas);
- un deseo constante de jugar, discutir juegos con otros (los pensamientos de un jugador se dedican solo a los juegos, el deseo de diseñar una cierta estrategia, predecir las acciones de los oponentes, cualquier otro tema no despierta su interés);
- la aparición de un deseo constante de recuperarse por cualquier medio (el ciclo "juego - pérdida - agresión" se repite constantemente, a pesar de numerosos fracasos y se convierte en el sentido de la vida del jugador en sentido literal);
- durante el juego, una persona está completamente inmersa en el mundo virtual, el más mínimo intento de distraerlo causa agresión, el resultado de las acciones en el juego o en la pantalla de la computadora se convierte en el evento más significativo de la vida.
Durante un ataque de agresión, un jugador no solo puede expresar insatisfacción con gritos, amenazas u otras emociones, sino también dañar su salud o incluso la vida de un ser querido. Las personas adictas al juego pueden jugar por intereses o por dinero, y la presencia de una cuestión de dinero no juega absolutamente ningún papel en las posibles consecuencias para la psique.
La adicción al juego es una enfermedad que pasa por tres etapas en su desarrollo: primero, una persona desarrolla un interés especial en los juegos y elige un entretenimiento específico, luego comienza a pensar constantemente en eventos virtuales y el resultado es la percepción del juego como un objetivo de vida y el evento más importante. Una persona diagnosticada con adicción al juego puede dañar no solo a los demás, sino también a sí misma. Hay casos frecuentes de suicidio entre esta categoría de pacientes.
Si hay signos de adicción al juego, es necesario buscar la ayuda de especialistas lo antes posible. Es muy difícil curar una enfermedad de este tipo, por lo que tratar de hacer frente al problema por su cuenta solo puede agravar el cuadro clínico.