La madurez es la cima del desarrollo humano: tanto del cuerpo como del individuo. El período más activo y productivo de la vida, cuando ya tienes experiencia y comprensión de tus deseos, así como la fuerza para llevar a cabo tus planes.
Características psicológicas de la edad madura
La madurez es el período más largo de la vida de una persona. Según diversas fuentes, varía de treinta y treinta y cinco a sesenta y sesenta y cinco años, dependiendo de las características individuales de una persona. La madurez llega cuando se obtiene una determinada experiencia de vida. Para algunos, la madurez es solo números en un pasaporte, mientras que otros pierden notablemente el interés por la vida, y cada vez con más frecuencia se le escapan las palabras: “¿Dónde debo ir a clubes / faldas cortas / estudiar / mudarme (subraye lo necesario), porque ya tengo treinta / cuarenta / cincuenta años.
En la edad adulta, una persona adquiere y revela nuevas cualidades: la confianza en sí mismo, la capacidad de apoyar a los demás, el realismo, el deseo de compartir su experiencia. Sin duda, en este período de edad ya no existe el maximalismo juvenil, una persona se comprende y se acepta tal cual es. Sabe priorizar y admitir sus errores.
Durante el período de madurez, a menudo hay dos crisis psicológicas: treinta y cuarenta años, cuando es importante repensar la vida y sacar conclusiones sobre cómo vivir.
La crisis de los treinta o la crisis del sentido de la vida
La crisis de los treinta años es, por supuesto, un concepto condicional. Puede llegar un poco antes o un poco después. La crisis se manifiesta en el hecho de que una persona siente la necesidad de cambiar radicalmente algo en su vida, y se produce una reevaluación de valores. Para hombres y mujeres, esta crisis también se desarrolla de diferentes maneras. Las mujeres a menudo cambian sus prioridades familiares y profesionales. Aquellos que han invertido todas sus fuerzas en sus carreras antes de los treinta comienzan a pensar en la importancia del matrimonio y la crianza de los hijos. Y aquellos que ya han formado una familia dirigen sus energías a ascender en la carrera.
Los hombres durante una crisis cambian su estilo de vida y su trabajo, a menudo piensan en cambiar de profesión.
La gravedad de experimentar una crisis también puede ser diferente: es una leve sensación de que falta algo, hasta la ansiedad crónica y la depresión.
Crisis de cuarenta años o crisis de mitad de camino
La crisis de cuarenta años a menudo se desarrolla en el contexto de problemas familiares: conflictos en el matrimonio, con hijos que se independizan, pérdida de los padres. Si los cónyuges no estaban conectados por nada más que hijos, entonces el matrimonio puede terminar en divorcio. Cuarenta años es la edad en la que se resumen los resultados de la vida anterior.
La crisis de los cuarenta años es más pronunciada en los hombres, aquí el dicho “canas en una barba - un diablo en una costilla” se adapta bien, especialmente si un hombre no siente que se ha realizado a sí mismo.
Es posible superar con éxito el período de crisis solo si miras el mundo sin lentes de color rosa, entiendes lo que puedo y lo que no puedo, y aceptas que no todas las personas son eternas.