Hablar en público es estresante para la mayoría de las personas. Los psicólogos están seguros de que la razón radica en la infancia profunda, el miedo al público aparece cuando te metiste por primera vez en compañía de otras personas: niños de tu misma edad. Pudo haber pasado en el jardín de infancia o en la escuela, pero entender que hay muchos como tú, gente que no está de acuerdo contigo en todo, te pone en un shock de por vida. Sin embargo, una buena preparación para la actuación, ayuda a sobrellevar el estrés.
Hablar desde el punto de vista de hablar en público
La teoría de la oratoria involucra cuatro modos de hablar en público:
- improvisado: una actuación en la que no se prepara en absoluto, pero confía en su conocimiento del tema.
- plan de esquema. Elaboras un plan claro, anotas todos los puntos y expresas tesis.
- el texto del discurso. El texto está compuesto, que se lee de la hoja.
- lectura de memoria. Lo mismo, ¡solo el texto también necesita ser memorizado!
A veces, los métodos se combinan. Por ejemplo, si está leyendo una conferencia sobre la poesía de la Edad de Plata, sería lógico leer ejemplos de poemas, habiéndolos memorizado, y la actuación en sí puede basarse en tesis.
En la mayoría de los casos, para prepararse para la presentación, se recomienda hacer un esquema detallado y ensayarlo frente a un espejo o amigos al menos una vez. Este método te permitirá, por un lado, no perderte nada innecesario y no perderte en tus pensamientos, y por otro lado, hará que tu actuación sea viva e interesante.
Elaboración del resumen
Para hacer un buen resumen, tómelo de acuerdo con algunas reglas. Primero, use hechos para respaldar su tesis. En segundo lugar, aísle lo principal. Algunas tesis, quizás, no encajan del todo con el tema del discurso. Ahora verifique si necesita agregar algo para expandir aún más el tema. En tercer lugar, asegúrese de que todas las tesis estén respaldadas por hechos. Si no tienes mucha experiencia en hablar en público, escribe las tesis y hechos en forma de oraciones completas para no buscar palabras en el escenario.
Asegúrese de practicar su interpretación. Idealmente, debería hacer esto al menos dos veces: una para leerse el discurso a sí mismo y la segunda para las personas, por ejemplo, sus amigos. En general, es útil pensar en el discurso durante unos días antes de hablar, esto te ayudará a encontrar las palabras correctas o recordar datos útiles y dar vueltas ingeniosas.
Antes de la actuación
Trate de no comer al menos 2 horas antes de su actuación. Además, 2 horas antes del discurso, no comiences cosas nuevas, en general, no tomes nada que pueda distraer tu atención de tu discurso y prepararlo para otros pensamientos.
Trate de no tener miedo de la audiencia. En última instancia, incluso si se desempeña mal, no sucederá nada terrible. Concéntrese en el contenido de su discurso, porque lo principal es transmitir sus ideas.