No administrar adecuadamente el tiempo durante la jornada laboral puede provocar exceso de trabajo y síndrome de fatiga crónica. El cumplimiento de reglas simples le permitirá utilizar su tiempo de trabajo de manera más eficiente.
El éxito y la carrera a menudo dependen de la gestión del tiempo, la capacidad de planificar su tiempo. No es ningún secreto que algunos logran hacer todo en el lugar de trabajo y abandonan el servicio de manera oportuna, mientras que otros permanecen constantemente en la oficina hasta tarde y se llevan la revisión en casa. Muchos están familiarizados con la prisa constante, la acumulación de tareas y asignaciones, la imposibilidad, debido a la enorme cantidad de trabajo, para concentrarse en la tarea actual. El exceso de trabajo es una consecuencia del trabajo prolongado bajo presión de tiempo.
Para organizar adecuadamente sus actividades, debe:
- Realice un inventario de su tiempo en unos pocos días hábiles y observe la falta de un horario claro, la finalización tardía de las tareas, la interferencia causada por los visitantes y las llamadas telefónicas.
- Analizar pérdidas temporales. Donde se dedicó más tiempo del necesario a una tarea en particular. ¿Cuánto tiempo se dedicó al teléfono? ¿Se concentraron todas las conversaciones telefónicas o se intercalaron con conversaciones sobre otros temas? Con qué frecuencia durante el día hubo comunicación con la gente a la hora de "comer". ¿Cuál fue el comportamiento en situaciones imprevistas: alboroto sin rumbo o reaccionar rápidamente y al grano?
- Haga la pregunta "¿Amo mi trabajo?" No se puede hacer ningún trabajo rápido y bien si uno está disgustado con él.
¿Dónde empezar?
- Determinar el objetivo para no perderse en las pequeñas cosas y entender hacia dónde ir.
- Haga un plan: 60% - tiempo programado, 20% - tiempo inesperado, 20% - tiempo espontáneo. Es necesario dividir el próximo negocio en largo, mediano y corto plazo. Planifique solo el volumen de tareas que realmente es posible afrontar.
- Llevar un diario es la herramienta de autogestión más importante, una buena herramienta de planificación y control. Es necesario ajustar los planes y modificarlos si resultan impracticables.
- Observar el principio de prioridad. Priorizar. Tareas sin importancia, posponer por un tiempo. Prueba de llamadas, encargos, cartas y otros pequeños asuntos para que se lleven a cabo al máximo de forma inmediata.
- Aprenda a decir "no" a un colega que le pida hacer el trabajo por él, en el caso de que: claramente pueda hacerlo él mismo; las fechas de vencimiento pueden esperar; debería haber completado la tarea ayer.
- Siga las reglas para el comienzo del día, la parte principal del día y el final del día. Reglas para comenzar el día: levántese después de despertarse con un estado de ánimo positivo, sin balancearse; vuelva a revisar el plan de trabajo del día; todas las cosas complejas e importantes que hacer por la mañana; resolver primero las tareas clave. Las reglas de la mayor parte del día: rechazar asuntos urgentes que surjan adicionalmente; evite acciones impulsivas no planificadas; hacer una pausa de manera oportuna, mantener un ritmo mesurado; realizar pequeñas tareas similares en serie; completar racionalmente lo que se ha iniciado; controlar tiempos y planes. Reglas para terminar la jornada laboral: terminar las tareas planificadas para el día; controlar los resultados y el autocontrol; haz un plan para el día siguiente.