Los padres son importantes y una de las personas más cercanas en nuestras vidas. Sin embargo, llega el momento en que necesitas separarte de ellos y vivir tu vida. Es importante separar no tanto geográfica como emocionalmente.
Desafortunadamente, hoy en día cada vez más jóvenes confían en sus padres y no en sí mismos. Esperan que mamá y papá los guíen por la vida hasta el final, garantizando estabilidad y seguridad. Pero esto no puede durar para siempre. Llega un momento en que una persona necesita determinar por sí misma cómo actuará y cómo seguirá viviendo. En esta etapa, muchos simplemente no pueden soportarlo y se derrumban, porque les es difícil darse cuenta de que nadie más, sino ellos mismos, son responsables de sus propias vidas. Cuanto antes el “niño grande” se dé cuenta de que la niñez ha terminado, mejor.
Los principales signos de dependencia psicológica de los padres incluyen:
- un fuerte sentimiento de culpa por cualquier ofensa a la madre o al padre, - esforzarse por ser bueno todo el tiempo,
- malentendido de que los padres también tienen derecho a cometer errores, - obediencia incondicional.
El proceso de separación de los padres no ocurre de la noche a la mañana. Una persona necesita darse cuenta de que es una persona separada que determina independientemente su vida y su destino. Las principales formas de superar la adicción incluyen las siguientes:
- Darse cuenta de que la opinión de un padre o una madre no puede ser la verdad última;
- no tenga miedo de decir lo que no le gusta;
- expresar libremente su opinión y juicio sobre cualquier cosa;
- separarse geográficamente de ellos;
- limita su participación en tu vida.
El proceso de separarse de las personas que te dieron a luz es doloroso, sin embargo, el resultado será un sentimiento de libertad e independencia.