Los drogadictos no presumen de su problema ni siquiera ante las personas más cercanas. A veces, la noticia de esta grave enfermedad es una completa sorpresa. ¿Cómo puede saber si su amigo o familiar es adicto a las drogas?
Apariencia
La piel del adicto se vuelve pálida, las pupilas se estrechan o dilatan, las marcas de las inyecciones se pueden ver en las manos y la incomodidad se puede notar en los movimientos.
Artículos inusuales
Tazas ahumadas, cucharillas, donde no les corresponde, jeringas, tubos de papel o dinero, tarjetas, botellas de plástico con agujeros quemados, tabletas incomprensibles con dibujos de cocodrilos, elefantes, etc. Uso sospechoso y frecuente de colirios. Los amantes de la marihuana ocultan así el enrojecimiento de los ojos.
Comportamiento
Agresión, insomnio, cambios de humor, dolores de cabeza frecuentes, incapacidad para concentrarse, distracción, mentiras frecuentes, sacar dinero, extraviar objetos de valor de la casa. El adicto pierde gradualmente el interés en sus ocupaciones y amigos anteriores, desaparece hasta altas horas de la noche con nuevos conocidos, de los que habla con desgana.
En palabras
Junto con la adicción a las drogas, aparece una nueva jerga extraña. Estas palabras, sacadas de su contexto normal, deberían alertarle: discos, barco, hélice, bollo, sombrío, gerych, golpe, secador de pelo, marcas, ácido, nieve, crack, hierba, hachís, conos.
Tienes dudas? Convence al sospechoso de que se someta a una prueba de drogas, que está disponible en todas las farmacias. Si sus miedos están justificados, comience a buscar un centro de rehabilitación, recopile la mayor cantidad de información posible sobre la adicción a las drogas e intente convencer a un ser querido de la necesidad de tratamiento.