Incluso los hombres no siempre se atreven a hablar abiertamente sobre el interés personal que ha surgido. En tales casos, los signos no verbales de simpatía: gestos y expresiones faciales, así como su comportamiento, pueden informar a una mujer sobre los sentimientos de un representante del sexo más fuerte.
Gestos y expresiones faciales de simpatía
Una persona recibe la mayor parte de la información no de palabras, sino de gestos, expresiones faciales, posición corporal y entonación del interlocutor. Los signos masculinos no verbales de simpatía se manifiestan de manera más notable que los femeninos, sin embargo, deben interpretarse de manera compleja, de lo contrario, corre el riesgo de sentir vergüenza o algún otro sentimiento de simpatía.
Una mujer en presencia de un hombre guapo comienza a arreglarse: se toca el cabello con las manos, la cara, se mira en secreto en el espejo. Los hombres también son propensos a acicalarse en presencia de una persona interesante: se enderezan la corbata, se alisan o, por el contrario, se despeinan, se tiran de la camisa y la chaqueta y se chupan el estómago. Pero dado que estos signos también pueden indicar un estado nervioso, preste atención a los gestos asociados con el cinturón. Un hombre que experimenta atracción sexual a menudo se endereza el cinturón y coloca los dedos detrás de él.
Durante una conversación con una persona bonita, las pupilas de un hombre aumentan y sus cejas se levantan ligeramente. Su mirada se desliza por todo el cuerpo de una mujer, de la cabeza a los pies. Y si un hombre ni siquiera intenta ocultar su interés y considera a la dama casi sin detenerse, esto habla de su deseo sexual.
Un hombre busca tocar a una mujer que le gusta. Siempre que sea posible, te apoyará por el codo o te tocará el hombro. Tales gestos no solo indican simpatía por usted, son una especie de señales del propietario: subconscientemente, el hombre lo considera ya conquistado.
Comportamiento de un hombre enamorado
Cuando una mujer bonita aparece en un grupo de personas, un hombre busca diferenciarse de su entorno. Puede hablar más alto, contar chistes e historias de vida divertidas. Al mismo tiempo, el cuerpo de un hombre generalmente se vuelve hacia la mujer que le interesa, y su mirada de vez en cuando se desliza sobre su cuerpo.
Un hombre interesado, durante una conversación, busca acercarse a una mujer bonita, como cerrándola del mundo entero. Este es un tipo de gesto posesivo de un amante.
El timbre de la voz de un hombre también hablará sobre el interés: cuando habla con el objeto de simpatía, la voz se vuelve más suave, más suave y más aterciopelada. Cuando habla, un hombre suele inclinarse ligeramente hacia la mujer que le interesa.
Otro signo de simpatía es arrojar la chaqueta sobre los hombros de una mujer. Este acto habla del deseo de proteger y calentar a una persona bonita, y también es una especie de "marca", porque poniéndose una chaqueta, una mujer absorbe el olor del hombre y se convierte en su "propiedad".