Los psicólogos definen el altruismo como un principio moral que prescribe realizar acciones destinadas a obtener beneficios o satisfacer los intereses de los demás, sin esperar recompensas externas. Y los héroes de la famosa caricatura soviética explican el principio del altruismo en dos palabras: "¡gratis, es decir, gratis!"
Hay varias variedades de altruismo. Por ejemplo, este es el amor de los padres por los niños. A veces la admiran, a veces la desaprueban, pero, sin embargo, es un hecho: los padres pueden hacer cualquier cosa por sus hijos. Sin embargo, muchos científicos explican este tipo de comportamiento no solo por el altruismo. Esto involucra el instinto de los padres de preservar su genotipo a toda costa. Un altruismo similar es común entre los animales. Entonces, la hembra puede sacrificar su vida para proteger a la descendencia.
Ayudar a extraños se considera lo más noble. Pueden ser tanto donaciones anónimas a orfanatos y orfanatos, como donaciones de sangre. Por supuesto, los científicos aquí también han encontrado un motivo egoísta para el desinterés humano: cuando una persona ayuda a extraños, su nivel de ansiedad disminuye y su autoestima aumenta. El altruismo en relación con los extraños puede darse en la sociedad y como acción obligatoria. Por ejemplo, es costumbre ceder el paso a personas mayores en el autobús, es costumbre sostener la puerta frente a una persona discapacitada, es costumbre llevar a un niño perdido a un policía. Estas acciones incluso se pueden realizar de forma inconsciente.
Existe la teoría de que el altruismo es inherente a los humanos a nivel genético. Los científicos realizaron un experimento con ratas, su esencia era que los roedores tenían que lastimar a sus compañeros: cuando encontraron comida, la rata sentada por separado se sorprendió. Algunas de las ratas se negaron de inmediato a morder el anzuelo, la mayoría de los animales, agarrando comida, se alejaron de la víctima y el resto no prestó atención a la rata bajo la influencia de la corriente. Más tarde, se llevó a cabo un experimento similar en humanos (por supuesto, el "paciente" sólo fingió estar convulsionando por la descarga). En ambos casos, la proporción de altruistas, conformistas y egoístas fue aproximadamente la misma: 1: 3: 1.
En contraste con el altruismo, se acostumbra poner egoísmo - comportamiento determinado por el propio beneficio. Los científicos y los filósofos han discutido durante mucho tiempo si estos conceptos deberían considerarse antónimos, porque a veces están muy entrelazados. En cualquier caso, tanto el altruista como el egoísta se complacen cuando se aprecian sus buenas acciones.