A veces hay situaciones en las que una persona se ve obligada a olvidarse de ser civilizada y a protegerse a sí misma oa sus seres queridos para liberar los primitivos instintos de supervivencia. Por supuesto, muchos problemas se pueden resolver de forma pacífica, pero a veces es necesario luchar. Sin embargo, muchas personas pierden la pelea incluso antes de comenzar porque tienen miedo de unirse a la pelea. ¿Cómo puedes superar tu miedo a pelear?
¿Por qué la lucha da miedo?
En los casos en que no se puede evitar una pelea, muchas personas que no están acostumbradas a infligir o experimentar dolor se apoderan de un estupor de pánico, que automáticamente conduce a la derrota, incluso si el oponente es obviamente más débil. Este pánico puede parecer diferente y no siempre está directamente relacionado con el miedo al dolor o el miedo por su vida. A veces puede tomar la forma de sentimientos morales o miedo a la ley, pero siempre se basa en una falta de voluntad psicológica para pelear.
Muy a menudo, el miedo a pelear se asocia con la falta de la experiencia necesaria del conflicto físico, generado por la educación moderna. Desde una edad temprana, a una persona se le enseña que pelear es malo, por lo tanto, en situaciones donde el contacto físico es indispensable, muchos tienen que superar una barrera moral difícil, mientras que el agresor, por regla general, está completamente desprovisto de preocupaciones sobre el próximo conflicto., lo que le permite ganar. La voluntad de luchar es una de las cosas más importantes que permite salir de una situación peligrosa y, en muchos casos, una demostración de esta voluntad es suficiente para extinguir el conflicto.
Incluso el arma de autodefensa más formidable no podrá protegerte si no estás listo para usarla. Por otro lado, una persona que está decidida a luchar puede ganar sin un arma.
Cómo vencer el miedo
Hay varias formas de vencer el miedo a una pelea, pero hay que tener en cuenta que en este caso no existen soluciones sencillas, y para dejar de tener miedo a meterse en una pelea, tendrás que trabajar mucho, especialmente si tienes poca experiencia.
La forma más común de cultivar un espíritu de lucha es inscribirse en cursos de defensa personal o artes marciales. Además de las habilidades de lucha y el fortalecimiento de la aptitud física, es probable que estas actividades le alivien el miedo al conflicto físico. Desafortunadamente, para lograr resultados significativos, será necesario un estudio largo y sistemático: una o dos clases no podrán cambiar radicalmente su estado de ánimo emocional ni consolidar sus habilidades de lucha. Esto suele llevar años de formación.
Si no es consciente del miedo a una pelea, no debe intentar resolver ningún conflicto por la fuerza. Lucha solo cuando no haya otra salida.
Para aquellos que no pueden permitirse pasar tanto tiempo superando su miedo a pelear, una forma psicológica de manejar sus emociones puede ser apropiada. Su esencia se reduce al hecho de que una experiencia intensa se puede convertir en otra si conoces la técnica. Por ejemplo, convertir el miedo en ira funciona bien: en una situación peligrosa, la tensión de la adrenalina requiere una liberación, pero si la canalizas en la dirección correcta, entonces, en lugar de enfriar el terror, experimentarás la lucha contra la ira que te permitirá luchar y ganar.. La capacidad de una persona para controlar sus propias emociones es muy grande y no debe descuidarse.