La gente suele quejarse de que su vida es difícil y de que es imposible poner las cosas en orden. Es comprensible: una persona que no tiene un objetivo claro en la vida, que simplemente sigue la corriente, confiando en lo que otros quieren de él, no es nada fácil en la vida. Para hacer la vida más fácil, para entenderlo, de hecho, un par de horas a solas, sin interferencias externas, son suficientes. Necesita ordenar sus metas.
Instrucciones
Paso 1
Toma lápiz y papel. ¿Piensa en lo que quiere o ha querido en la vida? No confíe en lo que otros querían de usted o en quién quieren verlo; piense en este momento solo en sus deseos y aspiraciones. Escriba todos sus deseos en la hoja.
Paso 2
Ahora elija el más apropiado de ellos, aquellos que le parezcan difíciles, pero posibles. Resalta cinco o seis goles y resáltalos. Ante ti están tus principales objetivos, intereses, por cuya observancia debes luchar ya través del prisma del que debes mirar la vida.
Paso 3
Trabaje en cada uno de estos objetivos. Esboce un plan de acción, determine qué es exactamente lo que se necesita para lograr cada uno de estos objetivos, organícelos en orden cronológico y resalte aquellas acciones que lo llevarán a sus deseos. Haga especial mención a aquellas acciones que contribuyan a resolver varios pasos a la vez.
Paso 4
Cree un cronograma para lograr sus objetivos con indicadores cualitativos y cronológicos. Recuerde que si quiere alcanzar su meta, debe comprender claramente cuánto ha progresado para que se haga bien y qué no.