No hay personas ideales en el mundo. Cualquier persona está destinada a tener defectos, menores o graves. En el primer caso, es muy posible aguantar las deficiencias. En el segundo caso, pueden complicar mucho la vida de la propia persona, y de aquellas personas que se comunican con él, en primer lugar, sus familiares. El problema es que la inmensa mayoría de las personas no se miran a sí mismas desde fuera y simplemente no ven las desventajas. Su propio comportamiento, hábitos y modales les parecen correctos y naturales.
Instrucciones
Paso 1
Sobre todo, recuerde que nadie se emociona con las críticas. Al escuchar los reproches por los malos modales, los hábitos, el comportamiento inapropiado, etc., una persona comienza instintivamente a defenderse, a poner excusas y formular contraacusaciones. Por tanto, es mejor no actuar directamente, sino de forma indirecta.
Paso 2
Tenga en cuenta que la crítica más justa, si se expresa de una forma dura, sin tacto y al borde de la grosería, no solo no logrará el objetivo, sino que también puede conducir al resultado exactamente opuesto. Por lo tanto, incluso si tiene todas las razones para estar insatisfecho, trate de controlarse. Hable con voz tranquila y educada, evite acusaciones y personalidades.
Paso 3
Comience enumerando las fortalezas y logros de la persona cuyo comportamiento desea cambiar. Alabado sea, ¡seguramente hay algo para eso! Luego, vuelva a encarrilar la conversación. Y trata de guiarlo con este espíritu: "Todo esto está muy bien, pero si hicieras esto y aquello, o si respondieras esto o aquello, ¡sería aún mejor!" En este caso, una persona verá en ti no a un crítico, ni a un enemigo, sino a un simpatizante que se preocupa sinceramente por él, por sus intereses. Y, en consecuencia, tratará sus palabras con atención y no las ignorará.
Paso 4
Durante una conversación, de todas las formas posibles, evite declaraciones categóricas como: "Debes", "Estoy seguro", "¡Créame, lo sé mejor!" etc. En su lugar, diga: "Me parece", "Si no me equivoco", "¿Qué te parece?"
Paso 5
Si estás hablando con una persona que es mucho mayor que tú, trata de comportarte con especial respeto, enfatiza de todas las formas posibles que valoras sus méritos, su experiencia de vida. Si la conversación es con un adolescente, en ningún caso demuestre descuido, condescendencia: dicen, todavía es pequeña, la leche de sus labios no se ha secado. No olvide que en la adolescencia, debido a un cambio brusco en los niveles hormonales, muchos hombres y mujeres jóvenes se vuelven dolorosamente orgullosos y susceptibles.
Paso 6
Trate de hacer que la persona piense que necesita cambiar. La forma de lograrlo depende de muchos factores. En cualquier caso, recuerde las palabras de D. Carnegie: "¡La mejor manera de hacer que una persona haga algo es hacer que quiera hacerlo!"