La irritación es un estado desagradable, provocado por la insatisfacción, cuando cualquier evento, incluso los más pequeños e insignificantes, no resulta como usted desea. Esta condición, si no se intenta controlarla o deshacerse de ella por completo, puede provocar agresión e ira.
Una persona se pone muy nerviosa e irritable si se acumulan demasiadas emociones en su interior. Así como el agua sale de un recipiente desbordado, así de una persona que no permite que sus sentimientos salgan al exterior, en un momento determinado estallan experiencias negativas que se transforman en irritación e ira. Por lo tanto, debe aprender a comprender sus emociones, vivirlas, ser consciente y luego asegurarse de dejarlas ir.
Como en una situación de estrés severo o con tendencia al aumento de la ansiedad, las técnicas de meditación y los ejercicios de relajación ayudan a afrontar la irritación. Las prácticas de respiración, la meditación dinámica, por ejemplo, en forma de bailar con cierta música, ayudan a superar un estado desagradable, cambiar y distraer.
Una visita a un terapeuta de masajes o un automasaje ligero y breve son formas efectivas de combatir la irritación excesiva. Durante el masaje, tanto el cuerpo como la psique están relajados, los pensamientos y sentimientos perturbadores desaparecen, las emociones se liberan imperceptiblemente. Un simple automasaje de manos, cuello y hombros, cara y cabeza, piernas antes de acostarse es especialmente útil.
La actividad física ayudará a aliviar la irritación causada por la acumulación de tensión y energía en el cuerpo. Correr, golpear una pera (o incluso almohadas en casa), hacer ejercicio vigoroso, nadar, hacer flexiones o sentadillas pueden ayudar a aliviar el estrés, alterar la química sanguínea, reducir la adrenalina y el cortisol, aliviando así la irritabilidad. En algunos casos, los juegos de computadora ayudan a liberar emociones negativas que pueden causar una agresión severa.
Si la irritación se convierte en una ola sofocante incontrolada, debe estirarse bien y luego sentarse, recostarse en una silla o silla y bajar los hombros. Luego inhale profundamente varias veces, exhale lentamente, tratando de respirar no con el pecho, sino con el diafragma, con el estómago.
Sintiendo una tensión constante y una irritación persistente, vale la pena recurrir a la arteterapia. Una vez que se haya establecido en un ambiente cómodo y tranquilo, intente dibujar cómo se ve la irritación. Debe dar libertad a su imaginación, no para intentar crear una obra de arte sobresaliente, sino para poner todos sus pensamientos inquietos y experiencias desagradables en el dibujo. Cuando no te apetezca dibujar en absoluto, puedes escribir detalladamente en un papel todo aquello que te enfurece, te cabrea y te priva de la armonía interior. Tanto dibujar como escribir no solo ayudarán a liberar emociones y destruir pensamientos innecesarios, harán que el cerebro cambie y tengan un efecto calmante sobre el sistema nervioso.
Al tratar de descubrir cómo lidiar con la irritación en una situación particular, debe tratar de tomar el control de sus propias emociones y mirar los eventos con una mirada "sobria". A los psicólogos les gusta repetir que no hay eventos buenos o malos, solo hay una reacción emocional ante ellos. Y cuál será esta reacción depende solo de la persona. Es necesario tratar de evaluar los eventos de manera imparcial, mirarlos desde una nueva perspectiva, sacando algo de experiencia incluso de algunos momentos desagradables.
Siempre es importante escuchar con mucha atención a su cuerpo. Por ejemplo, si la irritación se vuelve demasiado fuerte en el contexto del hambre o la fatiga, debe satisfacer las necesidades de su cuerpo en forma de comida y descanso, dormir. Cuando la irritabilidad aumenta debido a una persona, debe tratar de distanciarse de él o convencerse persistentemente de no reaccionar a sus provocaciones y acciones de manera demasiado emocional.