Puedes reconocer a una persona feliz por sus ojos. Sus ojos brillan como pequeñas chispas, está lleno de energía y carga a las personas que lo rodean con un estado de ánimo positivo. Todos pueden ser felices, solo necesitas atraer este estado hacia ti, aprender a hacerlo.
Instrucciones
Paso 1
Nuestro subconsciente está diseñado de tal manera que recuerda la mayoría de los momentos negativos de la vida, como acuerdos fallidos, una ruptura en una relación o un miedo experimentado. Por lo tanto, existe incertidumbre y duda de que la experiencia negativa pueda repetirse. Y debemos tener en cuenta que un concepto como la felicidad no atrae a personas con pensamientos negativos. De hecho, ¿por qué debería ser feliz una persona si no está de humor para esto y puede perder fácilmente su suerte? Para evitar que esto suceda, debe reservar 10 minutos diarios para pensamientos felices. Imagina que ya tienes lo que sueñas. Revive momentos de emoción, como si ya te hubieras comprado un coche nuevo o conocieras a tu alma gemela. Sueña cuando te apresures a trabajar y cuando te vayas a dormir. Por lo tanto, los sueños que ha inventado comenzarán a encarnar la imagen de una vida feliz, y el pensamiento de que merece ser feliz se hundirá firmemente en el subconsciente. Después de un mes de tales ejercicios en la vida real, seguramente se producirán cambios para mejorar.
Paso 2
Si hay una serie de eventos fallidos, en ningún caso debe detenerse en ellos. Sucedió, y bueno, al final, aprendemos de los errores y cualquier experiencia es muy importante. Es necesario sobrevivir a la situación y dejarla ir. Entonces atraerás la felicidad rápidamente, porque como dice el proverbio: "después de la raya negra, siempre hay una blanca".
Paso 3
Para una representación más detallada de una vida feliz y su atracción inicial, puede hacer un dibujo en el que debe reflejar sus sueños. Cuando una persona dibuja con inspiración, su mente subconsciente recuerda los momentos asociados con la alegría, la suerte, la anticipación del amor y una nueva etapa en la vida. Una persona así se sintonizará con una ola brillante, y la felicidad lo llamará imperceptiblemente pronto.