La expresión facial y el movimiento corporal pueden transmitir mucha más información que el contacto verbal. Un psicólogo consejero necesita conocer las reacciones no verbales de una persona para poder reaccionar a tiempo.
Instrucciones
Paso 1
Crea un ambiente en la oficina para que el cliente pueda verte completa y completamente. Debe ver tu disponibilidad, predisposición.
Paso 2
La posición en la que se sienta es importante. Trate de evitar cruzar los brazos y las piernas.
Paso 3
Cuando empiece a hablar, intente inclinarse ligeramente hacia el cliente. Esta postura habla de implicación, atención del consultor.
Paso 4
Mire a su cliente a los ojos con más frecuencia, pero recuerde hacer una pausa. Algunas personas encuentran el contacto visual intimidante y deprimente.
Paso 5
Estar relajado. Trate de evitar manipular objetos en sus manos, esto puede decirle al cliente sobre su entusiasmo.
Paso 6
Calcula el espacio para que la distancia entre tú y el cliente no perturbe el espacio íntimo de todos.
Paso 7
A veces, complementa el discurso del cliente con reguladores no verbales: asentir con la cabeza, agitar las manos, sonreír.
Paso 8
Trate de evitar toques innecesarios durante el asesoramiento. El contacto táctil es más adecuado para clientes que han experimentado la pérdida de un ser querido.
Paso 9
Trate de ser indulgente con las reacciones cutáneas. Si ve que el cliente se sonrojó, no se concentre en esto. También puede pausar o traducir el tema.
Paso 10
Tenga cuidado con las reacciones inconscientes del cliente. Por ejemplo, manipular el lóbulo de una oreja significa aburrimiento, mientras que morderse los labios significa emoción.