Una persona toma decisiones todos los días. Todas sus acciones son el resultado del análisis de ciertos procesos. A veces, tomar una decisión racional puede resultar difícil. La mejor manera de hacerlo es considerar todas las opciones disponibles y elegir la más razonable.
Instrucciones
Paso 1
Primero que nada, necesitas calmarte. Si está estresado y busca una salida a la situación, es probable que su decisión sea emocional o mal considerada. Tómate tu tiempo si sientes que no puedes controlarte, distraete y olvídate temporalmente de la tarea que tienes frente a ti.
Paso 2
Trate de comprender completamente el problema en el que está trabajando. Busque cualquier información que le ayude a tomar la decisión más racional. Los nuevos datos para usted le permitirán ver el problema desde diferentes ángulos. Consulte con sus amigos, es posible que ya se hayan enfrentado a una situación similar. También es importante obtener una opinión neutral. Intente hablar con personas que no estén interesadas en sus decisiones. Su opinión será la más objetiva e imparcial.
Paso 3
La solución a un problema a menudo se considera inequívoca. La primera salida de la situación que me viene a la mente parece ser la única correcta. Sin embargo, casi siempre este no es el caso. Tome una hoja de papel e intente anotar una lista de alternativas en ella. Su tarea en esta etapa es simplemente enumerar todas las posibles soluciones sin tratar de analizar sus consecuencias. Algunas de las opciones pueden parecer locas al principio, pero luego pueden convertirse en las mejores de todas. Por eso, no te pierdas nada, escribe lo que se te ocurra.
Paso 4
El siguiente paso es analizar las consecuencias de determinadas acciones. También debe sopesar los riesgos que está asumiendo. Repasa la lista de opciones que has recopilado e indica brevemente junto a cada una si es una buena o mala opción. Las opciones con las peores o las mejores consecuencias se pueden destacar por separado. Una vez identificadas las consecuencias de una decisión en particular, considere si vale la pena los riesgos que conlleva. Si los riesgos resultan inaceptables, no dude en descartar esta opción. Además, tache aquellas decisiones que conduzcan a las peores consecuencias.
Paso 5
En algunos casos, una decisión puede ser extremadamente difícil de tomar. La cantidad de opciones puede ser muy grande, muchas de ellas parecerán bastante aceptables. En este caso, intente confiar en su intuición. Quizás ya haya resuelto problemas similares y recuerde los resultados de sus acciones. Esto le ayudará a tomar la decisión correcta, como le parece en este momento. Si no puede escuchar su voz interior, intente engañarse a sí mismo. Hable sobre el problema en voz alta, exprese formas de resolverlo como si estuviera dando un consejo a otra persona.
Paso 6
Cualquiera que sea su decisión, esté preparado para asumir la responsabilidad. Incluso si resulta no ser el más racional, es importante que sea deliberado y no se tome en caso de emergencia. De cualquier manera, puede decirse a sí mismo que hizo todo lo posible para resolver el problema.