La capacidad de administrar adecuadamente su tiempo es una de las cualidades más importantes no solo para una persona de negocios, sino incluso para un ama de casa o un escolar. Tenga en cuenta que el hábito de organizar racionalmente sus días de trabajo no aparece instantáneamente, debe desarrollarse a lo largo de los años. Por lo tanto, para no perder más minutos valiosos, es mejor comenzar esto ahora mismo.
Necesario
- - una lista de todos sus asuntos y tareas para el futuro cercano;
- -el horario de su actividad laboral;
- -Un diario o agenda.
Instrucciones
Paso 1
Crea un diario o simplemente un cuaderno en el que anotarás todos tus asuntos de actualidad para cada día. Pero no creas que se convertirá para ti en una panacea para todos los males - el diario es solo una herramienta que te será útil si dominas los principios fundamentales de la gestión del tiempo, es decir, el arte de planificar tu trabajo (y no única vez. Son estos principios los que deben ser entendidos por todos los que carecen de tiempo, incluso para sus propios asuntos obligatorios e inevitables.
Paso 2
Repasa mentalmente todas las tareas actuales que dedicas a jornadas laborales para resolver. A menudo sucede que muchas de estas tareas deben resolverse y, además, al mismo tiempo. Es esta situación la que conduce a la falta de tiempo, tensión nerviosa y, como resultado, depresión. Relajarse. Teniendo en cuenta todos sus asuntos, en cualquier caso puede encontrar la manera de dedicar a cada uno de ellos tanto tiempo como sea necesario, o al menos, tanto como sea posible físicamente.
Paso 3
Divida todas sus tareas en varias categorías: la base de su planificación debe ser la prioridad de las tareas, que determina su secuencia. Bueno, por ejemplo, puede dividir las tareas actuales en tres categorías: las más urgentes, las menos urgentes y algunas demoradas. Divide cada una de tus jornadas laborales en periodos de tiempo, mientras decides cuál de ellas será más efectiva y cuál será menor (por ejemplo, dependiendo de si perteneces a la categoría de "búhos" o "alondras").
Paso 4
Planifica tu día a día, correlacionando la prioridad de las tareas planificadas y la eficiencia del trabajo en determinados periodos de tiempo. Por ejemplo, si el caso está en la categoría de los más urgentes, debe planificarse para el comienzo del día, cuando la cabeza todavía está "fresca", y los asuntos menos urgentes, para la noche. Los asuntos de procrastinación se pueden planificar para este día, siempre que les preste atención solo si queda tiempo para asuntos más urgentes. Al mismo tiempo, nunca hagas una cosa en detrimento de todo lo demás, trata de seguir el cronograma planificado y abandona el caso, llegando al punto, si un trabajo igualmente importante de diferente naturaleza está programado para este momento.