La mayoría de las personas se sienten frustradas por las largas vacaciones o las vacaciones. Los psicólogos se refieren a este fenómeno como síndrome de las vacaciones. Y de hecho, la estacionalidad no es importante aquí, el estado de una persona es importante. En palabras simples, esta es la incapacidad de tomar un descanso del ritmo de vida moderno.
Trabajo, trabajo y más trabajo
Puede no estar físicamente presente en el trabajo, pero volver mentalmente constantemente a los problemas profesionales. Preocúpate por las reuniones futuras, ensaya discursos, ponte nervioso para que los colegas no estén intrigando en tu contra. Y por eso, en cada oportunidad, revise su correo. Al mismo tiempo, trate de sonreír a familiares y amigos, pero aléjese mentalmente.
U otro escenario. Tienes una semana libre y es en esta semana que decides levantarte a las ocho de la mañana para hacer desayunos saludables. Haga una limpieza general, desmonte los gabinetes y elimine las alfombras. Como resultado, no queda tiempo para uno mismo, la fatiga se acumula y la depresión no está lejos.
El descanso debe ganarse
No es solo la incapacidad para pasar del trabajo al ocio lo que nos hace pensar constantemente en el trabajo, sino también el sentimiento de culpa por “actividades inútiles”. Con qué frecuencia, cuando intentaba sentarse con un libro en el sofá o en el baño, su voz interior preguntaba: "¿Te lo mereces?" Se acumula un sentimiento de culpa, parece que es necesario hacer algo útil. En este punto, debes detenerte y pensar por qué tu crítico interior no te permite relajarte. La razón puede ser planes no cumplidos o una falta de coincidencia con las expectativas de alguien.
Vale la pena entender que todos tienen derecho al descanso. Y no te regañes por la pereza, solo ganas fuerzas, por eso te mereces unos días de "no hacer nada".
Y para que las vacaciones no se conviertan en un "maratón de limpieza" y las "actividades útiles" se deben hacer una lista de tareas pendientes. Es mejor si solo incluye las cosas más importantes. También debe recordarse que durante las vacaciones hay una sensación de "ilimitado", estiramientos simples de tareas durante varias horas. Pase lo que pase, reserve un tiempo estrictamente definido para las tareas del hogar, después del cual, tenga tiempo para completar el trabajo o no, vaya a descansar.
Relájate con las reglas
Para dejar de comportarse en vacaciones como esclavos que fueron liberados de las galeras, pero se olvidaron de desatar, debe cumplir con algunas reglas.
Quítese el reloj durante las vacaciones. Al principio los extrañará, pero muy rápidamente se acostumbrará a prescindir de ellos. Olvídate de las prisas, estás descansando.
Limite el tiempo que dedica a las tareas del hogar. Minimice el uso de Internet, tanto desde su computadora como desde su teléfono. Cuídate, haz lo que quisiste desde hace mucho tiempo, pero no hubo tiempo. De vacaciones, tienes la oportunidad de hacer realidad tu sueño. Y siempre tendrá tiempo para reanudar la comunicación por Internet.
Relájate lentamente. No tienes que correr a la piscina, pista de patinaje o teatro con una pequeña lágrima en los ojos. Te mereces un descanso tranquilo y mesurado.