Cuando una persona no puede relajarse incluso durante el descanso, lo más probable es que regrese al trabajo en un estado de "limón exprimido" y nada descansado. Y la idea de que todavía quedan un año o seis meses antes de las próximas vacaciones es completamente inquietante.
Instrucciones
Paso 1
Una persona sana pasa la mayor parte de su vida en el trabajo. No es de extrañar que, incluso durante los fines de semana o las vacaciones, las personas recuerden responsabilidades, reflexionen sobre los plazos y sigan respondiendo llamadas telefónicas de negocios. Saliendo de vacaciones o de año nuevo, intenta completar todas las cosas importantes, o al menos tirar de las "colas" a las que no tendrías que volver después del descanso.
Paso 2
Sentado en la orilla arenosa y escuchando el susurro de las olas, paseando bajo los arcos de los antiguos castillos y museos europeos, o simplemente recostado en el sofá un domingo, apague todos los teléfonos móviles. Procura no realizar reuniones de negocios responsables, y más aún no interrumpas tus vacaciones por los "asuntos urgentes" que han surgido. Si no se da tiempo para descansar, el cuerpo dejará de recuperarse físicamente rápidamente y la salud comenzará a deteriorarse.
Paso 3
¿Cómo pasar unas vacaciones o un fin de semana para quitarse la idea del trabajo de la cabeza? Los sabios dijeron que si el corazón está ocupado por lo viejo, lo nuevo no vendrá. Por lo tanto, trate de mantener sus pensamientos y manos alejados de sus actividades diarias. Puede ser activo o pasivo: hacer senderismo en una ruta desafiante, inscribirse en una escuela de danza irlandesa, visitar un planetario, escribir una obra de teatro, hacer un pollo de tabaco, etc. Las nuevas impresiones del negocio dominado lo ayudarán a olvidarse de las preocupaciones rutinarias.
Paso 4
No renuncie a su precioso tiempo de fin de semana con su televisor. Mientras miras su monótona transmisión, los planes para el lunes pasan por tu cabeza de vez en cuando. Pero los fines de semana están hechos para relajarse, así que primero recuéstate en la cama todo lo que quieras y luego dedícate a un fin de semana de entretenimiento: haz una excursión, pasa una noche en un café, disfruta de la actuación de una pequeña banda de jazz, un zoológico o pasar tiempo con personas ajenas a su profesión.