La envidia es un sentimiento del que nadie es inmune. Incluso si todo en la vida va bien para una persona, definitivamente habrá alguien que sea aún mejor. Más dinero, una esposa más bella, un trabajo más prestigioso, etc. No existe tal persona en el mundo que, al menos una vez en su vida, no miraría con envidia a un vecino o colega, soñando con conseguir lo que tiene. Es imposible deshacerse rápidamente del sentimiento de envidia, dicen los psicólogos, porque este sentimiento es tan natural e indestructible como el amor, el odio, la bondad, etc. Pero si conoces algunos trucos, puedes deshacerte de la envidia.
Instrucciones
Paso 1
Deja de compararte con otros. La suerte especial y la superioridad de alguien no son más que fórmulas falsas inventadas por ti. No cuente los pros y los contras suyos y de los demás. Al hacer esto, siempre corre el riesgo de descubrir que alguien es dueño de más ventajas, y comenzará a complicarse, a mostrar envidia y, con ello, a la indecisión o, por el contrario, a la ira. No habrá comparación, no habrá envidia.
Paso 2
Si no puede evitar compararse con los demás, intente ver estas comparaciones desde un ángulo ligeramente diferente. Por ejemplo, estás celoso de un vecino que tiene mucho más dinero que tú. Piense en lo que es más importante para usted: mucho dinero o la oportunidad de pasar mucho tiempo con sus hijos. O: el rico novio de un amigo, o un esposo cariñoso y confiable. Según los psicólogos, la fórmula "pero tengo …" es muy útil. Es decir, compare a su favor.
Paso 3
Aprenda a usar la envidia como indicador. Para hacer esto, intente analizar de manera imparcial y objetiva sus sentimientos: a quién y qué envidia con más frecuencia. Entonces descubres lo que te estás perdiendo en la vida y comienzas a esforzarte para asegurarte de tenerlo. Solo hay una condición: recibir no es para avanzar, para adelantar, sino con el entendimiento de que realmente lo necesitas, que tu vida se volverá más rica y brillante a partir de esto.
Paso 4
Ponte en la piel de las personas a las que envidias. Es probable que sus vidas no sean tan perfectas como imaginas. Y es muy posible que no tengan lo que tú tienes. Por ejemplo, viven en una lujosa casa de campo, pero no hay respeto ni comprensión entre los seres queridos, y tú te apiñas en un apartamento estrecho, pero tienes una familia amistosa y fuerte. ¿Quién es más afortunado? Hágase esta pregunta y pregúntese si quiere estar en el lugar del que envidia.
Paso 5
Trate de comunicarse menos con ellos y esté en presencia de alguien a quien envidia. Sucede así: en general, todo en tu vida te conviene, pero vale la pena visitar la casa de un pariente lejano e incluso tener una agradable charla con ella, ya que comienzan los ataques de envidia: ¡oh, se compró un nuevo auricular! ah, sus hijos ahora tienen institutriz, etc. Minimiza la comunicación con aquellos en cuya presencia experimentas un complejo de inferioridad.